En los últimos años, el cambio climático ha afectado a nuestro estado de una forma impactante, pues cada día pareciera que amanecemos con un nuevo clima, ya no se sabe qué día hará calor, cuando lloverá, qué día necesitaremos abrigarnos, etc; la realidad de las cosas es que nosotros somos los causantes de estos cambios bruscos del tiempo atmosférico.
El calentamiento global hace referencia al incremento de la temperatura tanto de la atmósfera como de los océanos pertenecientes al planeta Tierra que ha ido aumentando con el paso de los años; proyectándose una serie de daños a futuro, actualmente está provocando una serie de cambios en el clima de la Tierra o patrones meteorológicos a largo plazo que varían según el lugar. Conforme la Tierra gira cada día, este nuevo calor gira a su vez recogiendo la humedad de los océanos, aumentando aquí y asentándose allá. Está cambiando el ritmo del clima al que todos los seres vivos nos hemos acostumbrado. La causa principal de este alarmante fenómeno es la influencia humana ya que a través de la incesante emisión de gases de efecto invernadero como el dióxido de carbono, metano y óxidos de nitrógeno el calentamiento global ha ido empeorando.
Las proyecciones de modelos climáticos resumidos en el AR5 indicaron que durante el presente siglo la temperatura superficial global subirá probablemente 0,3 a 1,7 °C para su escenario de emisiones más bajas usando mitigación estricta y 2,6 a 4,8 °C para las mayores.
Efecto invernadero
El “efecto invernadero” es el calentamiento que se produce cuando ciertos gases de la atmósfera de la Tierra retienen el calor. Estos gases dejan pasar la luz pero mantienen el calor como las paredes de cristal de un invernadero. En primer lugar, la luz solar brilla en la superficie terrestre, donde es absorbida y, a continuación, vuelve a la atmósfera en forma de calor. En la atmósfera, los gases de invernadero retienen parte de este calor y el resto se escapa al espacio. Cuantos más gases de invernadero, más calor es retenido.
Los científicos conocen el efecto invernadero desde 1824, cuando Joseph Fourier calculó que la Tierra sería más fría si no hubiera atmósfera. Este efecto invernadero es lo que hace que el clima en la Tierra sea apto para la vida. Sin él, la superficie de la Tierra sería unos 60 grados Fahrenheit más fría. En 1895, el químico suizo Svante Arrhenius descubrió que los humanos podrían aumentar el efecto invernadero produciendo dióxido de carbono, un gas de invernadero. Inició 100 años de investigación climática que nos ha proporcionado una sofisticada comprensión del calentamiento global.
Los niveles de gases de efecto invernadero (GEI) han aumentado y descendido durante la historia de la Tierra pero han sido bastante constantes durante los últimos miles de años. Las temperaturas medias globales se han mantenido bastante constantes también durante este periodo de tiempo hasta hace poco. A través de la combustión de combustibles fósiles y otras emisiones de GEI, los humanos están aumentando el efecto invernadero y calentando la Tierra. Los científicos a menudo utilizan el término “cambio climático” en lugar de calentamiento global. Esto es porque, dado que la temperatura media de la Tierra aumenta, los vientos y las corrientes oceánicas mueven el calor alrededor del globo de modo que pueden enfriar algunas zonas, calentar otras y cambiar la cantidad de lluvia y de nieve que cae. Como resultado, el clima cambia de manera diferente en diferentes áreas.
Esta serie de fenómenos ha sido un verdadero enemigo desde hace algunos años pues ha venido afectando toda nuestra vida diaria y el entorno en el que nos desarrollamos como personas, por ejemplo, el año pasado se vivió una serie de fenómenos naturales muy poco usual en el estado, todo esto comenzó en la región del Istmo de Tehuantepec cuando el 22 de mayo de 2018 se presentó el fenómeno conocido como mar de fondo, al día siguiente se presentó otro fenómeno conocido como “pleamar” y por último la onda de calor que comenzó a partir del día 22 de Mayo, alcanzando una temperatura de hasta 50 grados centígrados.
La Cruda realidad de Oaxaca
El estado de Oaxaca se ubica en la región sur-sureste del país con 3.8 millones de habitantes, los cuales representan el 3.4 % de la población nacional; además el estado es reconocido por su diversidad biológica, ya que ocupa el primer lugar nacional en concentración de especies, se ubica dentro de los cinco estados del país con mayor biodiversidad y es el cuarto con mayor superficie forestal. Por otro lado, de acuerdo al Plan Estatal de Desarrollo-PED, el estado cuenta con un parque vehicular (2010) de 361, 340 unidades que generan una cantidad de monóxido de carbono-CO de 24, 543 toneladas anuales y 4, 460 toneladas de N2O, los cuales impactan directamente al efecto invernadero.
Estas cantidades aumentan si se considera la escasa participación de los propietarios de automóviles en el programa de verificación vehicular y el pago de tenencia estatal (emplacamiento en otros estados); el total de vehículos verificados en 2010 fue de 81, 815 vehículos (22. 64 % del total). Adicionalmente, el cambio de uso de suelo y la tala inmoderada aporta alrededor del 14 % de las emisiones nacionales de GEI que alcanza aproximadamente 643 millones de toneladas anuales. En el 2006 las emisiones derivadas de la disposición de residuos sólidos en suelo, del manejo y tratamiento de aguas residuales y de la incineración de residuos aumentó 198 %, al pasar de 33, 386 Gg en 1990 a 99, 627 Gg en 2006, mientras que en los procesos industriales hubo un incremento del 83.1 %, pasando de 34, 687 Gg en unidades de CO2 eq en 1990, a 63, 526 Gg de CO2 eq en 2006 (Mijangos-Ricardez & López-Luna 2012).
En el criterio de uso de suelo, cambio de uso de suelo y silvicultura, aporta un total de emisiones de entre 69, 674 y 86, 188 Gg CO2 (1990- 2006); esto se debe, a que el cambio de uso de suelo hacia cubiertas no forestales produce emisiones considerables de carbono producto de la combustión y descomposición de la biomasa removida de los bosques y la pérdida de carbono orgánico en los suelos.
Las estadísticas oficiales precisan que en 2002 se emitió una declaratoria por sequía en favor de 209 municipios de la entidad; un año después dos ciclones tropicales e incendios forestales afectaron a 80 municipalidades. En el 2005 dos ciclones tropicales afectaron 258 municipios oaxaqueños y las lluvias extremas 90; en tanto que en el 2007 las lluvias extremas originaron que se emitiera declaratorias de desastre para 13 comunidades.
En 2008 cuatro lluvias extremas generaron declaratoria para 76 municipios y los sismos para 41; un año más tarde una lluvia extrema afectó 5 comunidades; en 2010 la inestabilidad de laderas generó declaratoria para 121 y otras veces las lluvias extremas para 145 municipios. En el 2011 la inestabilidad de laderas originó la declaratoria de emergencia para 7 municipalidades; las inundaciones pluviales, fluviales, costeras y lacustres para 20 y lluvias extremas para 48.
En el 2012 los ciclones tropicales generaron 10 declaratorias para 103 comunidades, la inestabilidad de laderas para 7, las lluvias extremas para 137 y los sismos para 76; un año después los ciclones tropicales generaron 6 declaratorias para 51 municipios, la inestabilidad de laderas para 24 y lluvias extremas 11. En el 2014 las lluvias extremas afectaron a 33 municipios y la inestabilidad de laderas a uno. En 2015 la inestabilidad de laderas afectó a 2.
Es de suma importancia la forma en la que impacta el calentamiento global a nuestra vida, ya que es un tema serio y muy crítico que no debe tomarse a juego, en tan solo unos días puede cambiar nuestro ecosistema de tal forma que nuestro bienestar se vea afectado, las emisiones de gases que incrementan el fenómeno de efecto invernadero han ido en aumento en el estado de Oaxaca, lo cual es preocupante, es de suma importancia reflexionar acerca de nuestros actos, debemos darnos cuenta que nosotros los oaxaqueños somos afortunados de tener la gran biodiversidad presente en nuestro estado y si no dejamos de ser parte del calentamiento global estaremos asesinando a la madre naturaleza.
El rápido aumento de los gases de invernadero es un problema porque está cambiando el clima tan rápido que algunos seres vivos no pueden adaptarse. Igualmente, un clima nuevo y más impredecible impone desafíos únicos para todo tipo de vida. La mayor parte del calentamiento global se ha dado en los últimos 35 años, coincidiendo con el aumento de la emisión de gases de efecto invernadero por parte del hombre, según ha señalado la NASA.
Abramos los ojos, Oaxaca pasa por una crisis ambiental sin precedentes, no seamos parte del calentamiento global y pongamos nuestro granito de arena, ecobao te invita a investigar más sobre el Tema y de esta forma pasa la voz, la unica forma de echar marcha atrás todo el daño que hemos ocasionado es uniéndonos todos en búsqueda del bienestar de nuestro estado y nuestro planeta tierra.
Excelente artículo 👌